Estamos muy contentos de haber sido convocados a la conferencia de datos abiertos Abrelatam, que se llevó a cabo en México el día 29 de Septiembre de 2014. Estuvimos presentando nuestro proyecto monitor parlamentario, participando en un taller sobre los componentes de Poplus y asistiendo a infinidad de charlas y reuniones muy productivas.

Somos muchos

Si algo fué increíble de ver en México fué la cantidad de gente que tiene las mismas nombles intenciones y los mismos desafíos por delante que nosotros.

Estamos muy contentos de haber entrado en contacto con otros proyectos de monitoreo parlamentario:

• Guatemala: Congreso Transparente y Red Ciudadana
• Paraguay: Tedic
• Chile: Ciudadano Inteligente
• México: Gobierno Fácil, Fundar, Borde Político, Gobiérnate
• Ecuador: Observatorio Legislativo
• Argentina: Congreso Interactivo, Fundación Directorio Legislativo y Wingu
• Costa Rica: Global Integrity
• Uruguay: Sudestada
• Perú: 131voces
• Colombia: Congreso Visible

Esperamos que esta red pueda compartir y colaborar con código y estrategias para avanzar aún más.

Algunas reflexiones

Sobre la organización de nuestro proyecto

Este proyecto siempre se mantuvo gracias al trabajo voluntario y aprendimos estrategias para poder coordinar mejor esos esfuerzos y poder, en algunos casos, remunerarlos. Además discutimos posibles estrategias de sustentabilidad a largo plazo, buscando aliados locales.

Sobre las iniciativas de datos abiertos de gobierno

Sabemos que para convertir a un gobierno en una institución abierta no sólo es necesario crear capacidades dentro del gobierno, sino que la sociedad civil debe organizarse para demandar y reutilizar datos.

Escuchamos muchas presentaciones sobre iniciativas de gobiernos que, empujados por la Alianza para el Gobierno Abierto (OGP) exponen sus proyectos. Notamos en general la falta de incentivo a la reutilización de datos y la falta de escucha a las necesidades reales.

Sobre el movimiento en general

Dentro y fuera de la conferencia se discutió sobre cómo movimiento de datos abiertos está desconectado de la realidad social, por un lado por el alto nivel de concimientos que se requiere para poder manipular los datos, por el desconocimiento por parte de los ciudadanos de la terminología del campo, por lo pequeño que resulta el grupo que se interesa en analizar cada tema en tanto detalle, y también por la publicación de datos que no se corresponden con la agenda política del momento, llevando a las iniciativas oficiales a una situación de percibida irrelevancia.

El desafío es, entonces, estar cerca de los movimientos a los que se quiere ayudar para poder lograr que incluyan los datos publicados como información en sus procesos internos de toma de decisiones, y crear aplicaciones con un sólo propósito en un contexto específico.